Neolítico en Cáceres

Los yacimientos se concentran en la penillanura cacereña y en el norte de la región.

[4]​ La acidez del suelo seguramente dificultó el cultivo, pero por estudios palinológicos se sabe que había cereales.

Hay tres yacimientos con estudios de polen: El Conejar, Los Barruecos y Cerro La Horca.

A partir de dataciones en Los Barruecos y Garganta Canaleja, se puede intuir que hacia el 5000 se producen los primeros asentamientos con pequeñas comunidades que realizan actividades agrícolas en la cuenca del tajo; el problema está en la ausencia de suficientes dataciones absolutas.

[6]​ los dólmenes podrían desempeñar distintas funciones como enterramientos colectivos o marcadores territoriales.

Se puede relacionar el desarrollo del neolítico en Extremadura con otras zonas como Toledo o Portugal.

En Toledo, en la misma cuenca del Tajo, se ha datado el sepulcro megalítico de Azutan en 3800 +/- 130 ac.

En Segovia, en la Cueva de la Vaquera, en niveles neolíticos se han recuperado fragmentos de cerámica con características similares a las cerámicas encontradas en yacimientos neolíticos cacereños; dataciones por termoluminiscencia señalaron 3012 +/- 10 A.c.

Es probable que este yacimiento haya sido habitado ya en el 4000 ac.

En Salamanca, en la Peña del Bardal, se ha identificado una cabaña neolítica con piezas de sílex y cerámica decorada con impresiones.

Los datos recogidos permiten afirmar que había presencia humana desde comienzos del neolítico, también el paso a la agricultura y el desarrollo de comunidades agrícolas.

El yacimiento se encuentra en una zona granítica, con afloramientos rocosos que forman abrigos naturales.

Los suelos son ácidos, con escasa fertilidad para el cultivo (aunque hay que tener en cuenta la variabilidad edafológica a lo largo del tiempo).

El yacimiento se sitúa cerca del punto mal alto del entorno, se trata de una zona con numerosos recursos hídricos (varias charcas, arroyos y regatos cercanos).

El yacimiento de los barruecos es clave para explicar el desarrollo del neolítico en la región.

También se han identificado hongos coprofilos, lo que indicaría presencia de ganado en el entorno cercano.

neolítico final: Se documenta la desaparición del acebuche y menor presencia de encinas.

Los investigadores han interpretado estos datos como consecuencia del desbroce para adaptar el terreno a actividades agrícolas y ganaderas.

[7]​ Se identificaron especies domésticas como cerdo, cabra, vaca, perro y caballo; el punto más problemático es la aparición de huesos de caballo, ya que en el yacimiento más cercano no se ha encontrado esta especie.

También se han identificado huesos de especies salvajes como tejón, zorro o gato montés; estos animales podrían haber habitado la cueva en momentos sin ocupación humana.

[11]​ En los niveles neolíticos se han encontrado principalmente fragmentos de cerámica lisa y decorada con impresiones.

[12]​ Estas dataciones apuntan a que fueron realizadas en torno al V milenio ac.

Durante la época en la que el pantano estaba en su cota más baja se identificaron tres espacios habitacionales (Gonzalez Cordero 1999).

[14]​ Cañadilla: Se sitúa en una pequeña elevación rocosa que domina el paisaje.

El yacimiento esta arrasado por las constantes subidas y bajadas de nivel del agua.

La ausencia de restos óseos y semillas impide estudiar estos yacimientos en profundidad; pero como se ha encontrado un molino y herramientas líticas que se podrían haber usado para la recolección de plantas, y dado que el terreno es fértil y favorable a los cultivos, los investigadores deducen que los pobladores de estos yacimientos tenían conocimientos de agricultura (Gonzalez Crodero, 1999).

[8]​ A poca distancia del pueblo de Romangordo, se encuentra la Garganta Canaleja.

Se encontraron microfósiles coprofilos en más de un 10%, lo que indicaría actividad ganadera.

Se han encontrado cuatro localizaciones de interés en los alrededores del embalse.

La primera mitad del Holoceno en el territorio de Extremadura: Datos arqueológicos y paleoambientales.2011.

Los berruceos, típicos paisajes graníticos en Extremadura.
Dolmen de granito con una cámara de 3.0 x 3.5 m y un corredor corto orientado al Este. Cronología: IV-III milenio a. C. Situado en las cercanías de La Aceña de la Borrega, Cáceres.
Monumento natural de Los Barruecos.
Trabajos arqueológicos en la cueva de El Conejar
Embalse de Valdecañas.