Nacionalismo de izquierda

Por esto, las huelgas y otras formas de acción industrial cesaron durante la guerra[4]​.Su sociedad imaginaria se mantiene alejada de protestas laborales por mantener un estado constante guerra.El chovinismo social renació en la Europa del siglo XXI debido a las distintas crisis migratorias.En este contexto, los nacionalistas de izquierda rechazan total o parcialmente el neoliberalismo y la interferencia supranacional.Los nacionalistas de izquierda promueven que los Estados decidan por sí mismos sobre cuestiones como la economía, la salud y la defensa.El marxismo, en ciertos casos, ha apoyado movimientos nacionalistas si ellos tienen el interés de lucha de clases, pero rechaza otros movimientos nacionalistas considerados para distraer a los trabajadores del objetivo necesario para derrotar a la burguesía.Marx siguió la vista de Hegel que la creación de sociedad centrada por individuo civil por estados como un desarrollo positivo, en que esto desmontó la sociedad anterior religiosa y liberó la conciencia individual.En La ideología alemana, Marx demanda que aunque la sociedad civil sea una creación capitalista y represente la regla de clase burguesa, es beneficioso al proletariado porque no es inestable en esto, ni Estados ni la burguesía puede controlar una sociedad civil.Cuando Stalin se unió a los marxistas georgianos, el marxismo en Georgia estaban bajo la influencia de Noe Zhordania, quien evocó temas georgianos patrióticos y oposición para el control ruso imperial de Georgia.Sin embargo, Stalin realmente creyó que las comunidades culturales realmente existieron donde la gente vivió vidas comunes, y fue unida según obligaciones holísticas, mientras los otros que no encajaron estos rasgos eran «naciones de papel».Stalin identificó la cultura rusa como el teniendo la identidad mayor universalista que las de otras naciones.Pese a que Corea del Norte posee un sistema basado en el socialismo científico, aun así ha mantenido relaciones diplomáticas y de cooperación con países con otras formas de nacionalismo de izquierda no basadas en el socialismo marxista, como lo fueron Hafez Al-Assad en Siria y Achmed Sukarno en Indonesia, quienes fueron aliados estratégicos de Corea del Norte más bien por la necesidad de mantener a sus países en posiciones independientes al capitalismo occidental, sin que eso implicara que Corea del Norte adoptase reformas capitalistas como dichos países ni éstos adoptasen medidas socialistas como Corea del Norte.Tito construyó relaciones fuertes con los estados que tenían gobiernos socialistas y nacionalistas en el poder, como Egipto bajo Gamal Abdel Nasser e India bajo Jawaharlal Nehru.Los nacionalistas de izquierdas históricamente han conducido el separatismo y movimientos autonomistas en el País Vasco, Andalucía, Aragón, Asturias, Cataluña, Comunidad Valenciana, Baleares, Irlanda del Norte y Galicia.Aunque de naturaleza dictatorial, no adoptó un carácter represivo como los regímenes mencionados anteriormente.Algunos militares nacionalistas accedieron democráticamente a la dirección del Estado y conservaron las características de una democracia pluralista.En esta última etapa tuvo que hacer frente a una parte de sus seguidores que, ya desde los años sesenta, venía acercándose a posiciones de izquierda, aunque éstas no eran compartidas por su líder, quien consideraba a esta tendencia un elemento extraño inspirado desde el exterior de la Argentina: “Es un movimiento organizado en el mundo, con tendencia marxista, pero que no se sistematiza en nada: es una lucha para tomar el poder, exclusiva y directamente; una lucha activa y armada”.El filósofo A. C. Grayling describe las naciones como construcciones artificiales, "sus fronteras trazadas con la sangre de guerras pasadas".[27]​ Además, en The Transhumanist Handbook, Kate Levchuk afirmó que un transhumanista, por definición, "no cree en la nacionalidad"..[28]​ Bertrand Russell criticó el nacionalismo por disminuir la capacidad crítica del individuo para juzgar la política exterior de su patria.[33]​ Alfredo Cruz Prados afirma que «la misma nación es una entidad creada ideológicamente por él, y no algo natural, objetivo y anterior al mismo nacionalismo, como esta ideología afirma».[36]​ El escritor peruano Mario Vargas Llosa (2001) cuestionó asimismo la idea de una "identidad nacional".Este concepto, sostuvo, es "una ficción ideológica" que sirve los intereses del nacionalismo pero tiene poca substancia empírica o histórica.Vargas Llosa recordó a su audiencia en el Banco Interamericano de Desarrollo que las culturas están en continua transición y que ninguna ha sobrevivido sin tomar prestado de otras y cambiar con el correr del tiempo.Más todavía, según Vargas Llosa, las corrientes de pensamiento que atribuyen gran importancia a la identidad nacional inevitablemente amenazan la libertad y la expresión individual.América Latina está históricamente ligada "a casi todas las regiones y culturas del mundo", afirmó.Tiene dificultades para hacer otra cosa porque su punto de partida es siempre un concepto abstracto de cultura, que la concibe como una unidad uniforme u homogénea y la extiende idealmente a lo largo y ancho de un territorio sin atender a cuáles son las prácticas culturales cotidianas subyacentes o sin concederles relevancia moral y política».No obstante, considera que en países dependientes puede resultar útil para crear conciencia en la población.
El político e ideólogo socialista , Lenin , en su texto El derecho a la autodeterminación de las naciones , defiende el nacionalismo de izquierda. Postula que cada nación ha de tener derecho a la autodeterminación en un contexto imperialista . [ 15 ]