"J.D." planea cambiar de aires, todo para estar cerca de su hijo Sam, por lo que decide buscar empleo en otro hospital y abandonar el Sacred Heart, llevándolo a recordar todos los buenos momentos vividos en sus 8 años en el mismo.
Ted se alegra de no verle más la cara a su antiguo jefe.
Dorian frente a sus internos les confiesa que es su último día, no recibiendo respuesta alguna.
Elliot le aconseja a Dorian que si quiere sentir una despedida, solamente la pida.
Luego, recuerdan buenos momentos, el origen del apodo Bambi ("alguien tenía que enseñarte a caminar"); Dorian le agradece por ser como una profesora para él cuando llegó como interno al Sacred Heart.
J.D. se alegra del actuar de ambos y les confiesa que no está enojado.
Aunque luego de despedirse, un trabajador saluda al conserje llamándolo "Tommy", guiñando este una leve risa.
Finalmente Dorian se despide con un frío "buenas noches" a Cox, el cual le responde de la misma manera.
Mientras sale del hospital, J.D. recuerda con emotividad todo lo que vivió en sus 8 años en el Sacred Heart, como su familia, compañeros de trabajo, antiguas novias y pacientes que ya habían abandonado este mundo.
Al salir del hospital, Dorian repasa en su imaginación las posibilidades de su futuro, que ya no parecía tan aterrador gracias a la conversación con Dan.
Al salir del hospital, vemos como un conserje (cameo de Bill Lawrence) retira el lienzo que Turk le había hecho a J.D. por su adiós.