En Muga de Sayago y los cercanos topónimos Muga de Alba, Mogátar, Mogadouro (ya en Portugal) pervive una antigua raíz, para la que Coromines describe una múltiple base protovasca mūga, mŏga, būga, bŏga ('mojón': límite entre dos términos).
La tradición local relaciona Muga con muda o traslado, en cuanto que el actual emplazamiento del pueblo se formó en época antigua tras el abandono, por causas de una epidemia, de varios poblados del entorno.
La tradición también suele atribuir a los romanos la construcción de La Fuente del Toral, magníficamente conservada, con bóveda de cañón y tejado a dos aguas, si bien este punto no está del todo claro, ya que puede serlo en origen, pero habría sufrido modificaciones posteriormente.
En este sentido, el término de muga o moga aparece en distintos puntos del norte de España, asociado a nombres fronterizos y cuyo significado equivale a frontera o límite.
[6] Su historia también está ligada a la iglesia desde el siglo XV, ya que ésta tuvo un señorío en las dehesas de Fernandiel y Sobradillo de las Garzas, antiguos lugares con sus respectivas parroquias que posteriormente terminaron siendo despoblados, y que a finales del siglo XIX fueron adquiridos por el pueblo debido al proceso de la Desamortización.
Cuenta con un acceso porticado, en el que abre un gran arco de medio punto.
La ermita, de pequeño tamaño, tiene planta rectangular y en su interior se distinguen la cabecera recta y de menor anchura que la nave, apreciándose en el conjunto tres tramos separados por dos arcos levemente apuntados.
Encontramos en el interior una serie de pinturas murales pertenecientes a mediados del siglo XVI.
Y al terminar los asistentes comen en los alrededores, reunidos con la familia, con los amigos o con los vecinos.