Disturbios del 6 de febrero de 1934

La crisis económica y social afecta especialmente a las clases medias, que constituían el soporte tradicional de la República Francesa.

Según la versión policial, se habría suicidado, lo que suscita una oleada de general incredulidad.

A partir del día 9 de enero, se convocan trece manifestaciones sucesivas en París.

Asumiendo un destacado papel en las manifestaciones sucedidas desde enero, se encuentran las ligas de extrema derecha.

Fundada en 1899 por Charles Maurras, la Ligue d’Action française (60.000 miembros) tiene como objetivo derrocar las instituciones republicanas (despectivamente denominan «la gueuse» a la República) y lograr la restauración monárquica.

Se apoya en los Camelots du Roi, los cuales, a pesar de sus reducidos efectivos, son muy activos en las calles.

Por lo que respecta a Solidarité Française, fundada en 1933 por el adinerado perfumista François Coty, carece de objetivo político preciso y sus efectivos son menores.

No hay que olvidar, aunque sus militantes son insignificantes, al francismo de Marcel Bucard.

Pero la Association républicaine des anciens combattants (ARAC), organización que es en realidad un satélite oficioso del Partido Comunista Francés, llama igualmente a desfilar el 6 de febrero, aunque bajo consignas diferentes.

Son en efecto las ligas de extrema derecha quienes han jugado el principal papel en los disturbios.

En la Cámara de Diputados, la derecha intenta aprovechar los disturbios para forzar al Gobierno a la dimisión.

Los métodos violentos de las ligas, su apariencia paramilitar, el culto del cabecilla, hace que sean a menudo asimiladas al fascismo.

La mayoría de los historiadores, como por ejemplo Michel Dobry o Zeev Sternhell los consideran por el contrario como lo más próximo al fascismo en Francia.

Esta derechización se acelera aún más desde 1936, con el Gobierno del Frente popular en Francia y con el estallido del alzamiento militar con apoyo conservador en España que conduce a la guerra civil española.

Vista panorámica de la Plaza de la Concordia de París.