Se pierde el rol de transmisor y se le reemplaza por otros ligados a la orientación, el acompañamiento, la facilitación de recursos o la evaluación formativa.
[21] El TLA es el nombre dado a la siguiente generación Object Reference Model (SCORM) para compartir contenido (Poltrack, Hruska, Johnson y Haag, 2012) y del proyecto Tin Can.
[23] Isaac Asimov anticipó en 1988 la aparición de los MOOC en el vídeo titulado "Su visión hacia el futuro", pero ya anteriormente, en 1922, se produjo un fenómeno similar con los cursos radiofónicos cuyas pretensiones, planteamientos pedagógicos, objetivos económicos y visión de futuro coincidían con los de los MOOC y en particular los xMOOC.
[24] Como antecedentes de los cursos MOOC se pueden considerar, entre otras, a las siguientes iniciativas: OpenCourseWare (OCW) y los recursos educativos abiertos de la UNESCO (en inglés se emplea la sigla OER).
Realmente no podemos otorgar una fecha exacta a la existencia del primer MOOC, pues la discusión es intensa al respecto, y está sujeta a las características que definen un curso como MOOC.
Esta iniciativa tuvo continuidad en numerosos proyectos académicos dentro y fuera de los Estados Unidos, pero también existen algunos cursos previos a este que podrían considerarse MOOC, como el curso "From NAND to Tetris: Building a Modern Computer from First Principles", organizado por Noam Nisan y Shimon Schocken en el año 2005 (Shimon Schocken: The self-organizing computer course).
Stephen Downes y George Siemens abrieron al público un curso en línea llamado “Connectivism and Connective Knowledge CCK08” donde se inscribieron 2,300 estudiantes, Dave Cormier y Bryan Alexander sugirieron llamarlo “massive open online course” o MOOC (Siemens, 2012).
En Francia, Open Classrooms, que va ofreciendo cursos en línea en IT y lenguajes de programación desde 1999, empieza produciendo MOOC en 2012.
La constante demanda de una educación más personalizada, pero a la vez con restricciones económicas.
[cita requerida] En 2013 la Universidad Nacional Autónoma de México en alianza con Coursera desarrollaron sus tres primeros MOOC: "Pensamiento científico", "Ser más creativos" y "TIC para la educación".
Por su lado, la Universidad EAN dispone en su página web de siete MOOC autoformativos en distintas áreas del conocimiento: Inducción a la Formación Virtual, Atención y Servicio al Cliente, Herramientas para el Bienestar Personal, Construcción de Indicadores para la Gestión de Ventas, Finanzas para no Financieros, Globalización y Negociación Intercultural, Habilidades Gerenciales.
Estos programas generalmente están conformados por cuatro o más cursos MOOC.
Otros estudios con formato similar son los Certificados Profesionales, enfocados principalmente a temáticas de tecnologías como la ciencia de datos, la inteligencia artificial, la realidad virtual, o el internet de las cosas, que desarrollan en conjunto con compañías tecnológicas que ofrecen a su vez, certificados avalados por sus respectivas industrias.
En Argentina diversas universidades tanto de gestión pública (UBA, UNQ,[36]) como privada (UADE, BLAS PASCAL, USAL[37]) han desarrollado MOOC en distintas áreas temáticas tales como Ortografía, Medio Ambiente, Gestión del Clima Organizacional, Lenguaje Cinematográfico, Orígenes del Tango, Escenarios de Enseñanza y Aprendizaje, y Educación y Tecnología.
[39] Al respecto también se refiere Maggio (2018), planteando la preocupación acerca del rol del docente y un posible desdibujamiento sobre su figura el frente de una clase presencial, versus una oferta de temas y contenidos variados dictados por expertos reconocidos y la posibilidad de acceder a ellos desde plataformas que soportan el aprendizaje ubicuo.
Desde esta posición, en el MOOC se hace especial hincapié en la resolución de determinados tipos de tareas y actividades por parte del estudiante, que debe ir realizando progresivamente para poder ir avanzando a lo largo del curso.
Actividades que pueden ser elaboradas tanto de forma individual como grupal o colaborativas.
Los MOOC han mostrado a las instituciones universitarias que la oferta académica debe ser más flexible y abierta.
La mayoría de estas propuestas están centradas en el alumno y en el tratamiento que ellos realizan a la hora de apropiarse del contenido, por lo cual, la pérdida del rol transmisor del docente se vio opacado por otras funciones más ligadas a la orientación, el acompañamiento, las tutorías, la facilitación de recursos y la evaluación formativa.
[58] Son diversas las plataformas sobre las cuales se han venido creando MOOC.
[2] Se están experimentando múltiples formas en que los proveedores cobran por su contenido, desde certificados pagados para cursos individuales, pasando por micro titulaciones hasta maestrías completas en las que las universidades envuelven importantes servicios adicionales alrededor de los cursos abiertos.
Se establecería en cambio una interacción alumno-bot, que permitiría una experiencia más personalizada, en función de las inquietudes específicas del alumno.
El bot, desarrollado con Inteligencia Artificial, haría las veces de profesor.
[60] Los MOOC ya no son considerados la solución a los problemas de la educación pero tampoco desaparecieron como pensaban sus detractores.