Miguel Mariano Gómez

Siendo niño, su padre participó en la Guerra Necesaria (1895-1898) por la independencia de Cuba.

Una vez establecida la República, el padre de Miguel Mariano se convirtió en el principal caudillo político del Partido Liberal de Cuba.

En 1926 fue elegido Alcalde de La Habana, hizo oposición a la dictadura del General Gerardo Machado hasta que tuvo que partir al exilio en Nueva York.

No obstante el extenso programa de mejoras de su gobierno, no logró contar con un fuerte apoyo de la opinión pública y tuvo desde casi el primer momento una fuerte oposición política, sin que pudiese contar en el Congreso con una mayoría que le permitiese realizar su programa, situación que se agravó al perder el apoyo de una parte de los elementos políticos que habían contribuido a su elección.

Tras su destitución, perdió casi toda su importancia dentro de la política nacional cubana.