Miguel López de la Serna

Al igual que el obispo Juan de Frías, se enfrentó a los gobernadores de las islas que contraviniendo las leyes esclavizaban a la población autóctona.Según las crónicas, el gobernador ordenó una matanza indiscriminada de culpables e inocentes, esclavizando a los supervivientes.La respuesta del gobernador no se hizo esperar, amenazándole a su vez: «Mucho os desmandáis contra mí.Callad, que os haré poner un casco ardiendo sobre la corona, si mucho habláis».Incluso en su pueblo natal, la figura del obispo pasó rápidamente al olvido.