Diego de Muros II

Ahora, el manejo de la documentación custodiada en los archivos vaticanos, así como el hallazgo en España de nuevos documentos, ha posibilitado que se haya logrado poner a cada cual en el lugar que históricamente le correspondo.En dicho documento se citan los siguientes medios beneficios: Santa María de Troanes.Por tanto, y haciendo números, Diego de Muros II llegó a disfrutar, conjuntamente, de cuatro canonjías, peleando por conseguir dos más; un nombramiento de párroco otorgado directamente por el Papa, y diecisiete beneficios menores en diferentes iglesias gallegas.Diego de Muros II había sido incluido en una lista de episcopales que la Reina Isabel la Católica, ciñéndose a lo acordado con la Santa Sede, había mandado redactar.Alejandro VI, manda, por su parte, expedir las bulas para Canarias, viendo ambos en ello un homenaje póstumo al gran Cardenal de España.Al años siguiente, 1497, Muros II ya se encontraba residiendo en Canarias, ya que en ese mismo año se redactan las constituciones del primer sínodo diocesano de Canarias, llevándose a cabo unas segundas en 1506.Según noticias aportadas por el realejero José de Viera y Clavijo, que realizó sendas visitas pastorales en 1498 y 1503, Muros residió en las islas durante todo su pontificado, costumbre poco habitual en los prelados de la época, y aún menos en los nombrados para diócesis “perdidas” en el Atlántico.El tiempo que permaneció al frente de la única diócesis del archipiélago canario lo dedicó especialmente a legislar sobre temas pastorales, que tuvieron gran resonancia en las constituciones sinodales promulgadas por sus sucesores Fernando Vázquez de Arce y Cristóbal de la Cámara y Murga.