Cristóbal de la Cámara y Murga (Arceniega, 15 de noviembre de 1571-Salamanca, 29 de abril de 1641) fue un eclesiástico español, obispo de la Diócesis de Canarias[1][2] y de Salamanca.
[3][4] Fue Canónigo y Magistral de Badajoz, Murcia y Toledo y calificador de la inquisición.
De esta última obligación saltó a ser obispo de las Islas Canarias y de allí, prelado de Salamanca.
Murió en Salamanca el 29 de abril de 1641 y su cuerpo fue trasladado a Arceniega, su localidad natal, donde fue enterrado en el Altar mayor del Santuario de la Encina.