A finales de 1939, cuando se terminó el proyecto, la velocidad objetivo era mucho más alta, 750 km/h.
El enorme Daimler-Benz DB 603 V12 invertido de 44,5 litros fue seleccionado para propulsar el coche que batió récords.
La dificultad del desafío se enfrentó con dinero y genio de la ingeniería.
En 1939, el vehículo recibió el apodo extraoficial de Schwarzer Vogel (Pájaro Negro) por Adolf Hitler e iba a ser pintado con los colores nacionalistas alemanes, con el águila alemana y la esvástica nazi, pero el evento fue cancelado y el T80 guardado en un garaje.
El T80 sobrevivió a la guerra y finalmente se trasladó al Museo Mercedes-Benz de Stuttgart para su exhibición permanente.