Memorias de Antínoo

La novela se asemeja a la obra "El Túnel" del narrador argentino Ernesto Sabato: no puede saberse si se trata de una novela corta o de un relato largo.

[2]​ Las Memorias de Antínoo refieren exclusivamente a este personaje, pues toda la historia está contada en primera persona como si Antínoo escribiera su Memoria, igual que lo hiciera Adriano en la obra de Marguerite Yourcenar; sin embargo hay referencias obvias a las Memorias de Adriano bajo las formas del reproche o la insinuación.

Es decir que pudo, inclusive, gobernar con el privilegio de devolver, por ejemplo, tierras a los partos, y evitar el avance sobre Britannia o retroceder ante algunos ataques de los bárbaros, que finalmente se quedaban con nuevas tierras.

Yo diría que Adriano fue la primera queja romana por el ocultamiento, tras una extraña bruma, de la cultura griega.

Encontramos en ella ciertos recursos estilísticos y términos que hablan de un espíritu muy lírico por parte de quien escribe" (...) "En cuanto al lenguaje y a la construcción del relato, se advierte un registro poético que va in crescendo y copa el texto a nivel verbal e, incluso, visual.

Busto de Antínoo en la Villa Adriana , en Tívoli . Actualmente en el Louvre .