Matteo Rosso Orsini

Fue además un gran opositor al traslado de la Sede Pontificia de Roma a la ciudad de Aviñón, fue electo sucesor del Papa Celestino V, pero rechazo la elección y, por lo tanto también el papado.Matteo Rosso nació en la noble familia Orsini cerca del 1230, hijo de Matteo Rosso di Giangaetano Orsini y Constanza de Cardinale.[1]​ En 1262 fue creado cardenal diácono con el título de Santa María in Portico Octaviae, por el papa Urbano IV.[1]​ Participó en el segundo concilio de Lyon, convocado por Gregorio X, y en trece cónclaves, donde en cinco de ellos, al ser cardenal protodiácono, coronó a los papas elegidos.En 1277 fue nombrado por el tío, el papa Nicolás III, arcipreste de la basílica de San Pedro, cargo que mantuvo hasta el día de su muerte, y rector del hospital romano del Espíritu Santo en Sassia, además de protector de la Orden franciscana y en 1287 se convierte en cardenal protodiácono.