Cuando ese marqués fue designado virrey del Perú, se trasladó a América acompañándolo.
Regresó a España para seguir la carrera militar y tuvo destacada actuación en África, lo que le valió ascensos militares.
En consecuencia, Anglés abandonó su misión y se retiró a Potosí, donde fue corregidor hasta 1735.
Después de encontrarse con Moscoso, Anglés se retiró al Perú, donde falleció en 1738.
[2] Tuvo una enérgica actitud ante los indígenas, organizó las milicias e impuso respeto a los aborígenes.