María Guardiola

Fue seleccionada como candidata por Pablo Casado y más tarde apoyada por su sucesor, Alberto Núñez Feijóo.

Se comparó a Guardiola con Isabel Díaz Ayuso por haber sido también una desconocida cuando fue elegida candidata regional por su partido.

[8]​ En esas mismas declaraciones afirmó que sus «jefes son los extremeños y Extremadura no se gobierna desde Madrid» [9]​ Al cabo de una semana, María Guardiola realizó declaraciones más conciliadoras y afirmó: «Vox es un partido constitucional con el que me quiero poner de acuerdo».

[10]​ Finalmente, incumpliendo su palabra, cede a los deseos del Partido que ella mismo tachó de xenófobo y homófobo.

Guardiola creó, sin embargo, una oficina para gestionar la caza, la pesca y la tauromaquia.

María Guardiola apoya las rebajas fiscales que plantea el Partido Popular en toda España.

María Guardiola toma posesión como presidente de la Junta de Extremadura en el Museo de Arte Romano de Mérida.