Manuscrito de Santa Clara de Carrión de los Condes

Para comprender bien el repertorio que contiene este manuscrito primero debemos conocer mejor a la persona a quien va dirigido, la monja sor Luisa de la Ascensión, una de las religiosas más influyentes del primer tercio del siglo XVII, a quién visitaban reyes y señores para solicitar oraciones para su alma e intenciones.

Del mismo modo todas las celebraciones marianas tomarán gran importancia en este manuscrito, además están presentes los tres himnos que pertenecen al propio de la orden franciscana durante el período de la Contrarreforma, lo que demuestra la intención del compositor de hacer una polifonía adaptada y específica para la orden franciscana.

El repertorio, inicialmente todo anónimo, ha sido en gran parte identificado por la musicóloga Soterraña Aguirre.

El sistema habitual que emplea es el de transportar a la octava superior todas las partes de tenor, y a veces también los “altos” más graves, para ofrecer composiciones para tres voces agudas, más el bajo que era ejecutado por el bajón y el órgano.

Única voz que una mano posterior compaseó, posiblemente para facilitar su ejecución.

Fachada del convento de Santa Clara en Carrión de los Condes