Su pronunciación se basa en el dialecto pekinés, que es solo uno de las muchas variantes del mandarín, un grupo grande y diverso de dialectos chinos hablados nativamente al norte y al sudoeste de China.
El mandarín estándar es oficialmente conocido como: Los tres términos son usados indistintamente en comunidades chinas de todo el mundo.
Solo existen dos normativas distintas de mandarín: el llamado pǔtōnghuà en la República Popular China y el guóyǔ en Taiwán.
Hay pequeñas diferencias entre los dos en pronunciación y vocabulario; por otra parte, el pǔtōnghuà se escribe con caracteres chinos simplificados, mientras que el guóyǔ se escribe con caracteres chinos tradicionales.
Después del segundo curso, toda la educación se realiza en este idioma, excepto las clases de lengua local que se llevan a cabo durante unas pocas horas semanales en Taiwán desde mediados de los años 1990.