En Grecia, los filósofos presocráticos habían ‘inventado’ la naturaleza cuando resumían la totalidad de los fenómenos del mundo como singular: φύσις (phýsis), y esto fue heredado por Aristóteles.Más tarde, los pensadores cristianos medievales no vieron la naturaleza como inclusiva de todo, sino que pensaron que ella había sido creada por Dios; su lugar estaba en la tierra, debajo de los cielos y la luna inmutables.En la mitología clásica existía la Naturaleza (Φύσις, Natura) como teónimo, en calidad de personificación divina.No obstante su uso es tardío y estaba reservado más bien a los círculos filosóficos u órficos.[7] Aunque los conceptos grecorromanos pueden trazar paralelismos, otras culturas tienden a tener simplemente una deidad femenina de la cosecha y una deidad de la fertilidad, y/o una fuerza femenina personificada para desastres naturales destructivos, sin embargo, hay una diferencia; una personificación unificada a menudo no aplica todo lo anterior como en los conceptos grecorromanos.En la mitología inca, Mama Pacha o Pachamama es una diosa de la fertilidad que preside la siembra y la cosecha.En el archipiélago malayo, ese papel lo desempeña Dewi Sri, la madre del arroz en las Indias Orientales.
Imagen de la madre naturaleza, texto alquímico del siglo
XVII
, Atalanta Fugiens.