Macunaíma (libro)

La obra puede ser catalogada como perteneciente a una corriente de indianismo moderno, escrita desde una óptica cómica.El libro posee una estructura innovadora, no sigue un orden cronológico ni espacial.Es, en cierto sentido, una obra surrealista, donde se encuentran aspectos ilógicos, fantasiosos y leyendas.[2]​ Bartleby utiliza la ironía, en la Carta a las Icamiabas, como una manera de mostrar la fragilidad que tiene el lenguaje culto y que todo el poder de la clase intelectual se sostiene sobre un artificio.Allí pasa su infancia, pero no es una crianza igual a las otras del lugar.Crece y se enamora de la india Ci, "A Mãe do Mato" (la madre del monte), su único amor, con la que tiene un hijo, un niño muerto.Entonces, se desanima, pues sin su talismán, que, en el fondo, es su propio ideal, el héroe reconoce la inutilidad de continuar su búsqueda, se transforma en la constelación Osa Mayor, que para él significaba transformarse en algo que de nada sirviese a los hombres, por eso, va a parar al vasto campo del cielo, sin dar calor ni vida a nadie.