Máximo Lira
Comenzó por traducir una novela para El Independiente y llegó a ser redactor principal.[1] Durante la Guerra del Pacífico, en las elecciones parlamentarias de 1879, fue elegido como diputado propietario por Los Andes, periodo 1879-1882.[1] En 1885 fue nuevamente electo diputado propietario, pero por Angol, periodo 1885-1888; integró la Comisión Permanente de Educación y Beneficencia.[1] Su diario preferido ya no era El Independiente, sino Los Debates, 1885; La Época y La Tribuna.En ellos defendió su ideología; tuvo problemas y hubo polémica por su cambio de pensamiento, conservador a liberal.[1] En el año 1891 firmó la deposición de Balmaceda y se asoció al movimiento revolucionario.