Luisa Riera Muñiz

Fue la tercera de los once hijos formada por el matrimonio de José Riera Tuya y Josefa Muñiz Muñiz, campesinos en dicha localidad.

El matrimonio se trasladó a Madrid a principios de los años ochenta del siglo XIX, dónde vivían los padres de Josefa, José Muñiz González y Josefa Muñiz Figaredo, nacidos ambos en Breceña y quienes en algún momento posterior a 1856, se trasladan a Madrid, dónde José trabajaba como portero.

Dolores trabajó como maestra de escuela, lo que quizás influyó en Luisa.

Ese mismo año se trasladó a vivir a Madrid donde fijó su domicilio[1]​ y fue nombrada maestra de Villavieja del Lozoya.

[1]​ Al acabar la guerra pidió su reincorporación a su puesto de trabajo.

Ante los informes desfavorables la auditoría de guerra se dirigió al juez instructor para que procediera a instruir juicio sumarísimo.

[1]​ En otoño de 1942 y ante el temor del régimen franquista a un desembarco aliado en las Islas Baleares, muchas reclusas, entre ellas, Luisa Riera, fueron trasladadas a cárceles del país Vasco.