Durante su desarrollo escolar anduvo en distintos lugares como Saltillo, Texas y Múzquiz, donde se destacó por ser un estudiante distinguido.
Con este reparto de tierras, Lucio Blanco entra a la historia como un agrarista pionero en la materia.
No creo que la Revolución haya producido otro caudillo militar del empuje y arrastre de Lucio Blanco.
Ante la escisión de 1914, dejó el Ejército Constitucionalista y se unió a la Convención.
Por su enemistad con Francisco Villa, el pertenecer al grupo independiente de la Convención lo hizo salir del país, a Estados Unidos.
Regresó poco después apoyando a Venustiano Carranza, pero fue aprehendido y juzgado por un consejo de guerra, siendo defendido con éxito por José Urueta.
El Triunfo del Plan de Agua Prieta lo lanzó de nuevo al exilio, pero desde Texas, junto con Francisco Murguía, tramó un complot para vengar a Carranza e iniciar un movimiento antiobregonista.
Accedió Lucio Blanco a cruzar el Río Bravo acompañado de Ramón García y el coronel Aurelio Martínez, al momento de abordar, Ramón García tiende una mano a Lucio Blanco como para ayudarlo y en ese momento le pone una esposa en la mano derecha, el otro aro lo coloca en la mano izquierda del coronel Martínez.