Su tío, papa León X, arregló su unión con la heredera de la rama principal de la familia Malaspina, Ricarda, con quien se casó el 14 de mayo de 1520 y juntos fundaron la familia Cybo-Malaspina,[2] sucesivos marqueses, príncipes y finalmente duques de Massa y Carrara.
Después de permanecer en la corte francesa, en 1524 recibe el cargo de gobernador de Spoleto, y desde 1530 fue comandante general del Estado Pontificio, gracias a la influyente posición en la curia de su hermano Inocencio.
Su esposa fue descrita como una mujer con un carácter “feroz y perverso”.
Después de haber obtenido del emperador Carlos V la investidura suo iure de los feudos de su padre en 1529, Ricarda defendió obstinadamente sus prerrogativas incluso contra su marido y su hijo Julio, que querían socavarlas, y a menudo ha sido considerada el origen de las numerosas desavenencias familiares que culminaron en 1548 con la decapitación de Julio en Milán.
A estos hijos se suma Octavio, hijo ilegítimo, doctor en Leyes, fallecido en 1580 y sepultado en la Basílica de Santa Maria sopra Minerva.