Fue conformado por Eliseo Arango, José Camacho Carreño, Joaquín Fidalgo Hermida, Augusto Ramírez Moreno y Silvio Villegas.
Nuestro mayor anhelo es un conservatismo ascético, limpio y estoíco, que sea en la oposición o en el gobierno la reserva moral de la patria.
En consecuencia debe movilizar las clases campesinas mediante una profunda reforma agraria y colocarse bajo el palio de las encíclicas pontificias.
Al par que las codicias comarcanas se vuelven contra la República disolviendo el espíritu patrio, el advenimiento de fuerzas económicas extrañas empieza a desfigurar nuestra fisonomía”.
Augusto Ramírez Moreno le otorgó el nombre al grupo: "Mis hijitos, ustedes se tienen que bautizar.
Los leopardos, en especial Augusto Ramírez, Camacho Carreño, Eliseo Arango y Silvio Villegas, contribuyeron activamente en los periódicos, principalmente habría de destacarse que contribuyeron activamente en el periódico "El Nuevo Tiempo", como a su vez participaron en otros medios con una menor difusión como lo fueron "El debate" y "La Patria".
Los leopardos, como una importante escisión del Partido Conservador, representado a su vez un amplio legado que llegó a influir en otros miembros del partido tales como Gilberto Alzate Avendaño, con ideas principalmente hegelianas y corporativistas que se ven resumidas en la siguiente frase de Silvio Villegas: «Tesis: capitalismo, antítesis: socialismo, síntesis: corporativismo.»