Ricardo se arrogó la corona y encarceló a los hijos de Eduardo, que después desaparecieron.
[2] No obstante, los defensores de Ricardo argumentan que la promesa era real y legitimaba su ascenso al trono.
Commines escribió más tarde, Ricardo persuadió al Parlamento de que aprobaran la ley Titulus Regius, que arrebataba el trono a Eduardo V y se proclamó rey con el nombre de Ricardo III.
[7] Estos hechos arrojaron más dudas sobre el caso, pero historiadores posteriores la identificaron correctamente.
George Buck, que encontró la única copia superviviente del Titulus Regius, fue el primero en identificar a Leonor Talbot como la mujer en cuestión.
Comparten su opinión numerosos defensores de Ricardo, entre ellos Horace Walpole[8] y Clements R.
También suelen alegar que Stillington fue encarcelado por Eduardo IV en 1478 porque habló imprudentemente del contrato con el duque de Clarence.
[12] No obstante, según Helmholz (1986),[13] en esta situación la ley canónica seguiría considerando ilegítimos a los hijos de Eduardo, ya que la existencia del precontrato significaría que Eduardo había cometido adulterio con Isabel.
Se ha especulado que estas dos mujeres fueran Isabel Lucy y Leonor Talbot.
El historiador Michael Hicks apunta que el rey Eduardo tendía a conceder «beneficios» a cambio de sexo: «Tres jóvenes viudas, Leonor Butler, Isabel Lucy e Isabel Wydeville (Woodville) podrían haber obtenido beneficios concretos de Eduardo IV por medio de sus favores sexuales».