El león hispano es la alegoría o personificación nacional zoomorfa de España junto al toro.
La ciudad surgió como un castrum llamado Legio, donde se acantonaba la legión romana VI Victrix, y que durante la Edad Media el topónimo fue evolucionando hasta convertirse en León.
En el Renacimiento, en tiempos de Felipe II, una vez conquistada Portugal se representó alegóricamente a España como a un león victorioso ante el dragón (alegoría de Portugal) como se refleja en la portada del libro Philippus Prudens de Juan Caramuel Lobkowitz.
Al terminar la Guerra Civil Española, el dictador Francisco Franco decidió apartar al león de toda la simbología del régimen porque los vencedores lo asociaron como un símbolo de la República.
[3] Poco a poco fue cayendo en el olvido, tanto que en las últimas décadas del siglo XX el toro ha ido sustituyendo al león como personificación nacional de España.