Inicialmente, la demarcación comprendía también Samalús, Granollers, Palou, La Ametlla, la Garriga, la Roca, y Santa Agnes de Malanyanes, pero aquellos lugares fueron pronto enajenados por la corona.
La iglesia románica, dedicada a Santa Coloma, se encuentra documentada desde el año 1077.
Esta demarcación, tendría suficiente población y producción agrícola como para tener moneda propia.
La iglesia de Corró d'Amunt, dedicada a Sant Mamet, es románica, aunque ha sufrido diversas reconstrucciones.
Se trata hasta ahora, del hallazgo más antiguo de la presencia humana en el Vallés Oriental.
[9] Construido bajo el patrocinio de Joan Sanpera i Torras en 1913, y encargado al arquitecto Albert Juan i Torner, constituye un hito arquitectónico de la población, así como un referente del estilo modernista en la comarca.
A un lado de la torre hay una edificación exenta que funciona como capilla, de planta rectangular y con ábside semicircular, está cubierta con teja árabe a dos vertientes limitadas con un sencillo alero.
Dedicada a los santos Abdón y Senén está datada del año 1606.
En la restauración y excavación realizadas en 1970 se descubrieron diez silos bajo el pavimento de la nave.
Ubicada en Marata, en un entorno rural de gran belleza, es frecuentado por excursionistas y algunos pocos vecinos del distrito.