Cena de Emaús
El pasaje narra la aparición de Jesús resucitado a dos discípulos suyos de camino a la aldea de Emaús, la forma en que lo invitaron a pernoctar y cómo lo reconocieron durante la cena, en la fracción del pan.Los matices psicológicos de sus personajes otorgan un carácter único al pasaje, que fue analizado y reflexionado largamente por biblistas, exégetas y místicos, y a través del tiempo tornó en un tema muy tratado en el arte.Fue el pasaje dilecto del filósofo Jean Guitton:No se percatan de quién es el misterioso viajero hasta que reconocen su gesto al partir el pan, momento en que el desaparece.[2] Esa y otras exégesis son las que suelen hacerse en el comentario a este pasaje evangélico, propio de la liturgia católica del Tercer Domingo de Pascua (durante el ciclo A) o de las misas vespertinas del Domingo de Pascua de Resurrección (Ciclos A, B y C).