[3] La Libertad destaca por ser uno de los lugares de ocio y diversión playera más preferidos por los capitalinos salvadoreños, debido a su cercanía y a que desde la segunda mitad del siglo XIX se convirtió en el puerto más cercano a la ciudad de San Salvador.
Esto ha permitido que la localidad experimente un auge en bares, centros comerciales, hoteles y restaurantes de comida marina, todo, ubicado atractiva y estratégicamente a la orilla de la playa.
El mismo parlamento lo autorizó para el comercio exterior en el litoral del océano Pacífico en 1831.
[4] Antes de esa fecha el desembarco se hacía por lanchones asegurados con andarivel.
El gobierno provisional intentó que entregaran a Ezeta por medio de comunicaciones diplomáticas al gobierno estadounidense, pero al final el Bennington salió del puerto en el 25 de julio[7] con Ezeta en camino a San Francisco, California.
Para ese día, no se encuentra ni una sola cuadra sin personas, todas están abarrotadas por los mismos porteños, capitalinos y personas del interior del país que llegan a disfrutar de su buen ambiente hasta el amanecer con los mejores grupos y discos nacionales e internacionales.
[13] Asimismo, entre las áreas naturales destaca el Parque Nacional Walter Thilo Deininger.