Línea Villacañas-Santa Cruz de la Zarza

Abandonada tras el final de la contienda, volvería a estar en servicio entre 1954 y 1965, hasta su cierre definitivo por no ser rentable su explotación.

[2]​ Llegó a ser empleada por convoyes militares republicanos, pero tuvo una vida corta, ya que la guerra acabó en abril de 1939.

Desde 1961 también se introdujo material motor diésel, con el empleo de automotores ligeros que hacían estas rutas.

Sin embargo, la línea no terminó cumpliendo las expectativas creadas y su explotación se acabó revelando como altamente deficitaria.

A pesar del hecho de que la línea ya se encontraba clausurada, las vías no fueron levantadas hasta 1995.