En la actualidad el trazado se encuentra repartido en varias líneas, de las cuales la sección Guadix-Almendricos está clausurada.1] La sección Lorca-Baza fue construida por la empresa de capital inglés The Great Southern of Spain Railway Company, mientras que del tramo Baza-Guadix se hizo cargo la también británica The Granada Railway Company.Por este motivo, desde entonces ha habido diversas iniciativas ciudadanas que han buscado su reapertura, aunque sin éxito hasta la fecha.Esta línea ferroviaria se dividió para su construcción en tres tramos casi iguales entre sí, atendiendo a las dificultades de su obra e instalación.[4] En 1884 el empresario británico Edmund Sykes Hett solicitó a la administración española la concesión del ferrocarril Murcia-Granada.Un año después le serían otorgados los derechos de construcción, si bien estos solo afectaban al trazado comprendido entre Lorca y Granada debido a que el tramo Alcantarilla-Lorca ya estaba siendo construido por otra compañía.Así mismo, la compañía del «Sur de España» construyó un ramal entre Moreda y Granada, el cual entraría en servicio en 1904.[16] En comparación con el trazado entre Lorca y Baza, las obras de la sección Baza-Granada avanzaron muy lentamente.Del tramo Guadix-Baza se haría cargo una empresa de capital británico, The Granada Railway Company Ltd.Una vez que se completó la construcción del ferrocarril Murcia-Granada se dio la siguiente circunstancia: no solo no había un trazado único, sino que en realidad existían distintas líneas férreas en manos de varios operadores.La gestión de los diferentes tramos ferroviarios se mantuvo prácticamente invariable durante el primer tercio del siglo XX, salvo algunos casos.Esta situación se mantendría hasta 1936, cuando el Estado se incautó «Andaluces» debido a la maltrecha situación económica que atravesaba la compañía, adjudicando la gestión de las líneas que operaba a la Compañía Nacional de los Ferrocarriles del Oeste.Inicialmente la explotación del trazado fue arrendada a «Sur de España», labor en la que le sucedería «Andaluces» entre 1916 y 1925.Durante las décadas de 1960 y 1970 se introdujeron servicios modernos como los TER que hacían la ruta Granada-Valencia.[20] Otras secciones del ferrocarril Murcia-Granada permanecieron abiertas al tráfico, a pesar de que también estaban consideradas como deficitarias.2] La sección Murcia-Lorca-Águilas también estuvo amenazada, si bien la subvención económica del gobierno regional murciano evitó su clausura.El antiguo trazado Guadix-Almendricos se encuentra en su mayor parte desmantelado y sin uso, aunque en algunos puntos las vías permanecen intactas.En esta parte algunas de las estaciones se encuentran abandonadas y en mal estado de conservación, si bien otras muchas —como Baza, Huércal-Overa, Tíjola, Purchena, Serón o Zurgena— han sido rehabilitadas para ejercer diversas funciones.
Puente sobre la rambla del Ramil, perteneciente al antiguo ferrocarril.