Kombucha

Durante este proceso la colonia crece formando en la superficie del líquido un cuerpo de aspecto gelatinoso.La acidez y el alcohol limitan el crecimiento de otros microorganismos que podrían contaminar la bebida.En Japón, la kombucha se llama kocha-kinoko (紅茶キノコ), u ‘hongo de té rojo’.En Rusia se llama chajnyj grib (чайный гриб), literalmente ‘hongo del té’.El médico llegó a Japón con el «té de Kombu» y salvó la vida del emperador.Los chinos apreciaban al hongo por su propiedad de equilibrar el chi, la energía vital, y mejorar la digestión.Como a todas las cosas semejantes, los médicos chinos guardaban el hongo de la inmortalidad y longevidad en secreto, pero en vano, porque cualquier persona que tiene la bebida puede obtener el hongo solo dejando la bebida lista en reposo por varias semanas.[4]​ En China tiene varios nombres: En 1835 la kombucha se menciona por primera vez en la literatura rusa, cuando el investigador ruso P. R. Stantzevich viajó a Irkutsk, y escribió acerca de los inmigrantes de China y Manchuria.Dijo que ellos tomaban el té no solo caliente sino también frío, preparándolo con una especie de hongo.Pero solo el químico polaco Yuzef Bloshich fue el primero que describió los tres hongos como zoogleas de diferentes especies.Los medios televisivos atribuían a la bebida sorprendentes propiedades curativas, sin aportar pruebas.Si no se hiciera así la fermentación continuaría y la bebida tendría un sabor en exceso ácido.[20]​ La bebida contiene la vitamina C,[21]​ fermentos proteasa, amilasa, catalasa que ayudan a la digestión de azúcar y aceleran el metabolismo celular.El recipiente debe estar abierto, pero al mismo tiempo cubierto para evitar la contaminación.La biomasa ―de tamaño visible, color anaranjado y consistencia gelatinosa― recibe diversos nombres, siendo el más popular «madre».Esta masa es el soporte de las colonias bacterianas y va creciendo a medida que evoluciona la fermentación.El sabor final de la kombucha puede alterarse añadiendo otras bebidas al té fermentado obtenido.Aunque lo más común es hacer una segunda fermentación en botella donde se añaden ingredientes para darle sabor a la kombucha, como frutas, especias y hierbas frescas.[30]​ Así, existen estudios científicos en ambos sentidos, si bien siempre remarcando que la kombucha mal manipulada puede llegar a producir efectos dañinos en las personas.Sin embargo este hecho, no es suficiente para desaconsejar su consumo y los presuntos casos de toxicidad presentados no han podido ser asociados directamente a los componentes de la bebida, sino a componentes terceros.Desde comienzos del siglo XX, se ha pretendido demostrar científicamente sus supuestos beneficios para la salud humana.[33]​ Beneficios que también ya habían sido demostrados por los profesores R. Jayabalan a , S. Marimuthu b , K. Swaminathan en su estudio Changes in content of organic acids and tea polyphenols during kombucha tea fermentation.[34]​ Por su parte, por los profesores Caili Fu, Fen Yan, Zeli Cao, Fanying Xen y Juan Lin demostraron en su estudio, publicado como Antioxidant activities of kombucha prepared from three different substrates and changes in content of probiotics during storage,[35]​ sobre las mejores preparaciones y conservación de la Kombucha, las capacidades antioxidantes de esta bebida fermentada.[36]​; ello debido a casos clínicos en los que se ha asociado estas enfermedades y el consumo de Kombucha.Otros dos pacientes que no tenían VIH, sufrieron infecciones fúngicas graves y persistentes después de ingerir kombucha.
Un vaso de kombucha con hielo.
Hongo madre de la kombucha. Una vez cultivado, generalmente se presenta como un disco flotante sobre la bebida resultante, al tomar la forma del contenedor en que se prepara.