Kid Ory

Comenzó a tocar, con once años, en una string band, bandas callejeras que utilizaban instrumentos caseros pero, ya en 1911, formó su Brown Skinned Babies, que incluía a King Oliver (corneta) y a Johnny Dodds (clarinete).

Permanece entre Chicago y Nueva York hasta 1930, año en que regresa a California con Carey.

En los años 40, con el revival del dixieland, vuelve a la escena, tocando el saxo alto, aunque Orson Welles le convence de volver al trombón.

Abre un club en San Francisco, en el que sigue tocando hasta 1961.

Kid Ory fue conocido como El Rey del Tailgate, que es precisamente un estilo trombonístico llevado a su máxima expresión por él, para cubrir sus limitadas capacidades técnicas para improvisar[1]​ y que se caracterizaba por un lenguaje rudo y vehemente, de voz llena y opulenta, fraseo rápido y fluido, repleto de breves glisandos, que funciona como un perfecto sostén de la improvisación colectiva propia del hot.