Tras unos años de silencio, vuelve a grabar en 1938, con el trompetista Charlie Shavers y con Lilian Hardin.
Johnny Dodds fue un ejecutante, básicamente, de pequeños combos, en los que se convertía en insustituible.
[1] Generaba exquisitas frases melódicas, mudando sucesivamente los esquemas y la entonación robusta, graduando su vibrato característico.
Destacado intérprete de blues, era un magnífico improvisador colectivo, maestro en el contrapunto a la trompeta y al trombón.
[2] Influyó a un gran número de clarinetistas, entre los que destacan Buster Bailey y Mezz Mezzrow.