[4] También en el testamento citado declaraba haber hecho en el Pardo «ciertas obras que dejó començadas Alejandro Semín, mi padre, las quales acabé yo y dellas y de la tassa primera [...] ay pleito pendiente»,[2] pleito que seguía conjuntamente con Vicente Carducho y Patricio Cajés, pintores del rey, con los que había contratado en 1607 las pinturas del Real Sitio tras el incendio sufrido por el edificio en 1604.[5] Entre los trabajos que con ese destino se le encargaron, favorecidos por el impulso que recibió la decoración del palacio durante el reinado de Felipe III, figura la realización junto a Francisco Granello de copias de pinturas del Bosco y Brueghel el Viejo.También había pintado al temple y al óleo santos y otras cosas para varias monjas del convento de Santo Domingo el Real, que aún se le debían, y de Pedro Rodríguez del Corral, maestro de obras, había recibido cincuenta reales a cuenta de una Inmaculada Concepción y un San Pedro, el cual estaba solo en bosquejo.El propio fray Francisco García había estado en alguna ocasión en su casa en la calle de la Magdalena mientras trabajaba, viéndole pintar.De los seis ángeles que se le habían encargado reconocía haber terminado y entregado dos: los ángeles del protonotario y el del abad de Sahagún, y los otros cuatro tenía solo en bosquejo pues si bien al principio «le daban priesa para que los acabara como no le daban dineros no lo ha hecho».
Ornato de la fachada de la iglesia de San Jerónimo el Real de Madrid para las honras fúnebres por la muerte de Isabel de Borbón, con la participación de Semín y Félix Castelo. Grabado anónimo publicado en la relación
Pompa Fvneral Honras y Exequias en la muerte de la muy alta y Católica Señora Doña Isabel de Borbon...
, Madrid, 1645. Biblioteca Nacional de España.