Jules Jollivet (París, 1803-1871)[1] fue un pintor y litógrafo francés.
Interesado al mismo tiempo en la litografía, en 1826 viajó a Madrid para trabajar a las órdenes de José de Madrazo en la reproducción de las pinturas del Museo del Prado con destino a la Colección litográfica de los cuadros del rey de España el señor don Fernando VII, obra colectiva editada por el Real Establecimiento Litográfico de Madrid entre 1829 y 1832.
El mismo año se colocó sobre la puerta la primera placa esmaltada con la representación de la Trinidad.
[7] Dolorido con lo que creía hipocresía del clero e incomprensión del público ante cualquier novedad, Jollivet se justificó en dos escritos: De la peinture religieuse á l’exterior des églises, à propos de l’enlèvement de la décoration extérieure du porche de Sant-Vicent-de-Paul, impreso en París en 1861 y Peinture en émail sur lave.
Sa raison d’ètre et sa défense contre les obstacles opposés a son adoption, aparecido un año después, titulándose en ambos «peintre d’histoire»,[8] defensa que ampliaría poco después con un nuevo opúsculo titulado De la polychromie de l'architecture par l'emploi des émaux, París, 1867.