Las obras más importantes que realizó en Ciudad Rodrigo, (Salamanca) fueron encargadas por el obispo Don Antonio Cayetano Cuadrillero y Mota.
Los planos presentados deben corresponder con los que se conservan en el archivo de la Real Academia.
Contrajo matrimonio con Saturnina de la Horra y en 1751 declara tener tres hijos menores.
Posteriormente a éstos nacieron Juan Marcelino Sagarvinaga, bautizado en Castrojeriz en 1753, y Manuel, que recibió las aguas sacramentales cuatro años después en Salamanca.
Su trayectoria y estilo arquitectónico reflejan la paulatina introducción del gusto neoclásico en España, que él conoció de primera mano por su cercanía a la Corte, aunque en sus obras también se observa la influencia del lenguaje tardobarroco vigente en aquel momento.