En 1845 pidió al arquitecto francés Juan Herbage el primer plano topográfico de la villa del puerto de Coquimbo, el cual fue presentado al gobierno chileno el 22 de julio de 1850 y aprobado el 13 de agosto del mismo año.
[6] Al fallecer, la ciudad de La Serena ofreció a su familia recibir los restos en una cripta que se había construido en el cementerio que Melgarejo había impulsado en 1844, lo cual no fue aceptado.
En su honor la municipalidad encargó pintar un retrato suyo que estuvo en la sala de los intendentes (sede del gobierno regional) y actualmente es exhibido en el Museo Gabriel Gonzalez Videla.
Aun se conserva una tumba simbólica del intendente Melgarejo en el primer patio de la necrópolis de la capital regional.
En el tercer cuarto del siglo XIX, una de las principales calles longitudinales del puerto de Coquimbo, llamada en un principio "de la Aduana" fue bautizada con su nombre.