Juan Francisco Fernández de Sabariego
Recibió su nombramiento del rey Felipe V, sustituyendo en la gubernatura de Yucatán a Antonio de Figueroa y Silva.Llegó a la península de Yucatán desembarcando en el puerto de Holkobén, hoy conocido como Río Lagartos.[1] Durante su breve administración debió enfrentar la preservación de la región de Walix, actualmente Belice, que su antecesor había arrebatado a los filibusteros ingleses hacía sólo unos cuantos meses con grandes esfuerzos bélicos.Esta acción por parte del nuevo gobernante resultó exitosa y los marineros yucatecos regresaron a Campeche trayendo cuatro balandras piratas que apresaron con 128 tripulantes de nacionalidad inglesa y buena cantidad de mercancías decomisadas a los piratas.A su muerte, Bernabé de Solís y Pedro Zapata de Argüello ambos alcaldes en funciones cubrieron provisional y brevemente la gubernatura, hasta en tanto Santiago de Aguirre (en junio de 1734) fue nombrado gobernador interino por el virrey de la Nueva España que a la sazón era Juan Antonio Vizarrón y Eguiarreta.