Vicente Camargo

Prosiguó la lucha independentista en 1811, dando auxilios al Ejército del Norte.Su táctica consistía en atacar intermitentemente a las tropas españolas en cada lugar donde era posible, con lo que lograban dificultar mucho sus desplazamientos por territorios montañosos.En el Alto Perú quedaron unas quince “Republiquetas”, que mantuvieron la resistencia contra los realistas y complicaron mucho sus operaciones.Logró varias victorias en su carrera, pero en general se limitó a hacer muy difícil los desplazamientos por la montaña.Sin embargo, logró mantener Cinti libre de realistas, al punto que esta villa pudo elegir y enviar un diputado al Congreso de Tucumán.Este episodio ha sido rescatado por el escritor e historiador Luis Alberto Guevara López (2016), en su libro "Revolución en los Cintis 1810 – 1820".