Se casó y tuvo dos hijos que no le dieron descendencia.
[1][2] Su actividad como técnico municipal no se limitaba a desempeñar funciones de sustitución del arquitecto municipal, sino que en su caso incluían las funciones de comisionado en certámenes relacionados con la arquitectura y todo lo que la rodeaba.
En la celebrada en Barcelona en 1888 recogió el galardón recibido por el Ayuntamiento de San Sebastián, por la labor que este estaba desempeñando en el desarrollo arquitectónico de la ciudad.
[1] En los casi cuarenta años de actividad municipal San Sebastián estaba experimentando un desarrollo urbano muy importante.
Su obra se enmarca en un eclecticismo sobrio y clasicista.