Ya en el gigantesco monumento del Jueves Santo a San Martín Pinario se aprecia la influencia de obras clásicas como el Laocoonte o el Apolo de Belvedere que se completa con la adición de esculturas infantiles.Sus crucifijos, que aún transmiten el profundo peso del dolor, evocan un equilibrio sereno.En las estatuas femeninas se inspiró en su esposa, como en una de sus obras maestras, la Santa Escolástica también de San Martín Pinario, donde la figura femenina, entre el colapso suave y el delicado apoyo del hermoso Ángel que recoge su espalda, da sensación de ingravidez y beatitud.En él influyó Manuel Álvarez, quién sería director de la Academia.Ramón Otero Túñez lo ha definido como un escultor barroco pero de alma neoclásica.
Santa Escolástica coronada por un ángel
. Monasterio de San Martín Pinario.