Cuatro años más tarde, a la muerte del higúmeno Esteban, Jorge se consagró como su sucesor.
Para defender la autocefalía georgiana, Jorge se refirió a la misión que llevó a San Andrés hasta la antigua Cólquida e Iberia, versión que aparece en la tradición eclesiástica medieval georgiana.
Al regresar a Grecia, Jorge visita Constantinopla y obtiene el decreto imperial para la educación de los estudiantes georgianos en Athos.
Jorge el Hagiorita sería posteriormente canonizado por la Iglesia Ortodoxa Georgiana, conmemorándose anualmente cada 10 de julio.
La influencia del legado de Jorge en Gla tradición religiosa georgiana ha sido inmensa.
Sus traducciones así como sus obras originales sientan las bases para la himnografía, liturgia y hagiografía medievales georgianas.
955-1028), y marcó el punto más alto de la tradición literaria que florecía en los centros del monasticismo georgiano.
[5] Las Vitae de Nuestros Benditos Padres Juan y Eutimio, y el Relato de sus Dignos Logros (ცხოვრება ნეტარისა მამისა ჩუენისა იოანესი და ეფთჳმესი და უწყებაჲ ღირსისა მის მოქალაქობისა მათისაჲ) [Tskhovreba net’arisa mamisa chuenisa Ioanesi da Eptŭimesi da uts’q’ebaj ghirsisa mis mokalakobisa matisaj] es la obra original más importante de Jorge, dedicada sus predecesores atónitas.