Johann Bernhard Basedow

[2]​ Asistió al gymnasium de Hamburgo (Johanneum) y estudió Teología en Leipzig.

Pero tenía poco interés por las clases y se dedicó a estudiar por su cuenta, leyendo numerosas obras, entre las que merecen recordarse las de Crusius, Wolff y Reimarus, que despertaron en él su separación de la ortodoxia.

El latín puede interesar como lengua hablada, como un posible medio de entenderse los europeos.

La gramática y la retórica no sirven, aunque las conserva entre sus enseñanzas porque algunos autores clásicos tienen «cosas útiles».

[2]​ Locke, Comenio, Rollin, Rousseau y La Challotais son la fuente de casi todas sus ideas pedagógicas.

Lo original en Basedow es, principalmente, la armónica fusión de aquellas doctrinas en una teoría educativa supeditada a lograr lo útil.