Al ser liberado se fue a Brasil, donde trabajó en los servicios militar y diplomático.
Durante ese período lideró nada menos que siete golpes de Estado.
En 1835 fue nombrado ministro de Guerra y presidente del Consejo, pero renunció el mismo año.
Se convirtió en primer ministro una vez más durante unos meses en 1870 (mayo-agosto) y fue enviado en 1871 a Londres como embajador, donde murió.
Escribió la obra Sobre la conexión entre las ciencias verdaderas y la religión revelada, que fue publicada en Berlín.