Jesús Basiano Martínez

[4]​ Estudia con los Padres Escolapios y en el Colegio "Cardenal Cisneros".

Entra en contacto con pintores como Gustavo de Maeztu, Aurelio Arteta, Pablo Uranga, manteniendo una estrecha relación con otros pintores vascos también importantes de esa época.

[7]​ Calificación que no debe hacer olvidar la amplitud de paisajes también por él pintados de otros sitios como el País Vasco, Aragón o Castilla.

Así, su pueblo natal, Murchante, le rinde en junio de 1951 un popular homenaje, incluyendo su nombramiento como hijo predilecto y una placa conmemorativa en su casa natal.

Se sucederán las giras y exposiciones por medio mundo (La Habana, Madrid, San Sebastián, Vitoria, etc) realizando varias en Pamplona siendo la de 1965 especialmente antológica.

Su pintura evolucionó desde el divisionismo con que captaba las finezas atmosféricas iniciales, al postimpresionismo final, donde la materia cromática construye y se expresa a lo Utrillo.

Evolución que en Basiano fue esencialmente temperamental, pues era capaz de finezas y brusquedades.

Abre una senda que será frecuentada con posterioridad por pintores como Miguel Pérez Torres así como con otros autores José María Monguilot, Antonio Loperena Eseverri o César Muñoz Sola.

Placa conmemorativa