Mantuvo amistad desde los años 1950 con los otros críticos que conformarían la Nouvelle Vague: Éric Rohmer, Jean-Luc Godard, Claude Chabrol y François Truffaut.
En 1964, introdujo al crítico Serge Daney en Les Cahiers du cinéma.
Animó durante varios años un cine-club semanal en la Cinémathèque française.
Para el homenaje que la Cinémathèque française dedicó a Éric Rohmer el 8 de febrero de 2010, realizó para ese evento una película titulada Claude et Éric, donde Claude Chabrol cuenta su complicidad con Éric Rohmer en Les Cahiers du cinéma durante los años 1950.
También contribuyó en la nueva revista de cine La Septième Obsession.