Jardín botánico de la Universidad de Valencia

[1]​ Se encuentra situado en la calle Quart, junto al antiguo cauce del río Turia.

En 1778 la ciudad aprueba estas previsiones, pero aún pasarán veinte años en hacerse realidad.

La Real Sociedad Económica Valenciana de Amigos del País, interesada en las mejoras de los cultivos, también quería concurrir con el Ayuntamiento a hacer realidad esta dotación científica aportando terrenos para la ubicación de la Alameda, mientras apuntaba que a los aspectos instructivos y utilitarios se había de añadir el aspecto lúdico, que pudiese servir al mismo tiempo, «para el decoro, hermosura y recreo del paseo público».

Pero esta conjunción no sería tan fácil, pues las dos partes querían remarcar sus respectivas prioridades, la científica y docente centrada en un repertorio sistemático representativo del mundo botánico, por parte de la Universidad y la más utilitaria de aplicación a la agricultura, por parte de la Sociedad Económica.

La ciudad, postreramente en 1798, le cede a la Universidad los terrenos prometidos, pero bien pronto se suspenden las plantaciones, según parece por la mala calidad del suelo y las molestias producidas al vecino paseo de la Alameda.

Sus dimensiones podían dar acogida a ciertos vegetales como el Astarapea, Aralia, Chorisia speciosa o el Ficus benjamina que llegaba a crecer más de 5 m y no tenía cabida en las otras estufas.

Seguramente serían sustituidos por los actuales de hierro, durante el último cuarto del siglo XIX.

En el año 1900, siendo director Eduardo Boscá, se inauguró el actual umbráculo, también de hierro, sobre un cuerpo de ladrillo, obra inspirada en las marquesinas ferroviarias, proyectada en 1897 por el polifacético arquitecto madrileño Arturo Mélida Alinar que vendría a completar la dotación del recinto y ofrecerle uno de los espacios más atractivos para su disfrute.

Posteriormente, siendo director el también catedrático Manuel Costa, se procede a la rehabilitación integral del jardín (saneamiento de las plantaciones, alternativas de irrigación, el cuidado de sus cuadros, etc.) y los elementos arquitectónicos más característicos (cerca del recinto, invernaderos, estufas, umbráculo, pabellón).

En este momento el Jardín Botánico de la Universitat constituye un espacio docente, vegetal, arquitectónico e histórico, y además caracterizador del paisaje urbano.

Existe un movimiento llamado Salvem el botanic cuyo objetivo es la protección del jardín botánico de Valencia y sus alrededores, incluida la ampliación del solar adyacente (terrenos de Jesuitas).

Estructura metálica del Umbráculo.
Edificio de investigación visto desde la calle Quart.
Vista desde la calle Quart.
Invernadero de la Bassa.
Bassa
Huerto
Plaza de Carles Pau .
Invernadero con helechos .
Sección de las plantas medicinales.