James Scott, I duque de Monmouth

Numerosos parlamentarios intentaron imponer esta elección tras la crisis provocada por la Exclusion Bill pero fue en vano.[2]​ Cuando Jacobo llegó a la edad adulta, se observó su gran parecido con Sidney.[3]​ Como hijo ilegítimo, no entraba en la línea sucesoria al trono, aunque hubo rumores de que Carlos y Lucía se habían casado en secreto.[1]​ En 1678, durante la guerra franco-neerlandesa, Monmouth comandó la brigada anglo-holandesa, ahora contra Francia.Al año siguiente, tras su regreso a Inglaterra, se puso al mando del pequeño ejército reclutado para acabar con la rebelión de los covenanters escoceses, a quienes venció en la batalla de Bothwell Bridge.[1]​ Al incrementarse su popularidad entre el pueblo, Monmouth fue obligado a exiliarse en las Provincias Unidas de los Países Bajos en 1679.[6]​ A la muerte del rey Carlos II, Monmouth encabezó la rebelión que lleva su nombre, desembarcando con tres buques en Lyme Regis (Dorset), con la intención de arrebatar el trono a su tío Jacobo II.[8]​ Monmouth se autoproclamó rey en varios lugares a lo largo de su ruta, entre ellos Axminster y Chard.El prisionero imploró clemencia sin éxito, e incluso se ofreció a convertirse al catolicismo, pero fue en vano.[18]​ Otro retrato, antes identificado como Monmouth, muestra un hombre dormido o muerto, y podría ser el que dio pie a esta historia.
Jacobo Scott, duque de Monmouth.
James Scott como comandante de la tercera guerra anglo-neerlandesa en 1672, por Jan Wyck
Ejecución de Monmouth en Tower Hill el 15 de julio de 1685, en un grabado de época.
Escudo de armas de James Scott antes de su matrimonio con Ana Scott