Asimismo, se brega por coordinar "tal análisis teórico con la lucha práctica de las masas contra el imperialismo", en un triple plano: 1) nacional, 2) latinoamericano y 3) mundial, respetando ese orden.
También se ubican en esta corriente Ángel Perelman y su libro Cómo hicimos el 17 de octubre, Alberto Belloni, autor de Del anarquismo al peronismo y Ernesto Ceballos con su Historia política del movimiento obrero argentino.
Otro cordobés, Roberto Ferrero –de inicial militancia en el izquierdista Partido Obrero Revolucionario Trotskista (PORT) dirigido por Homero Cristalli (Camarada Posada)- interpretó la Reforma Universitaria de 1918 y del radicalismo cordobés, que pertenece a una tradición distinta a la del llamado Yrigoyenismo.
En 1953 se conforma el Partido Socialista de la Revolución Nacional y en 1962 el Partido Socialista de la Izquierda Nacional (PSIN), junto a Jorge Enea Spilimbergo, Fernando Carpio, Alberto Converti, Roberto Ferrero, Ernesto Ceballos, Enrique Rivera y otros.
Los libros de la izquierda nacional influenciaron a sectores medios universitarios, aumentando la aceptación del peronismo.
Por esa época, el presidente Menem hacía ingentes esfuerzos por sumar a su gobierno a sectores nacionalistas y del peronismo clásico: "La soberanía política, la independencia económica y la justicia social, son irrenunciables.
El Partido Patria y Pueblo, fundado por Jorge Enea Spilimbergo, es uno de ellos con presencia política en la ciudad de Buenos, en Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Chubut y Tierra del Fuego.
El grupo Socialismo Latinoamericano existe desde 1993, históricamente dirigido por Osvaldo Calello, fallecido en 2014, y entre cuyos miembros está Gustavo Cangiano.